Por: Abigail Arenas
La guerra entre Rusia y Ucrania pareciera no tener un fin próximo, pues, aunque la comunidad internacional esperaba que las sanciones económicas y la diplomacia apaciguaran las intenciones de invasión del presidente ruso Vladimir Putin, éste ha dejado en claro que no pretende echarse para atrás.
Por esto mismo, los jefes de Estado y Gobierno de la Organización del Tratado del Atlántico Norte (OTAN) celebraron una reunión extraordinaria para discutir la intervención que la alianza podría tener en el actual conflicto, ya que -durante todo este tiempo- Moscú no se ha limitado en alardear sobre sus armas de destrucción masiva.
El secretario general de la OTAN, Jens Stoltenberg, ha señalado que, la alianza está lista para contraatacar en la misma magnitud de ser necesario. Declaró que, como medidas preventivas y de advertencia, la OTAN equipará a Ucrania y desplegará “defensas químicas, biológicas y nucleares adicionales que fortalecerán a los batallones”, esperando que Putin no tome ese camino, pues, sobre aviso no hay engaño.
Foto de portada: Matti