Por: Laura Pontigo y David Chaparro
Bajo la dirección de Hugo Arrevillaga Serrano, con música de la agrupación uruguaya El Cuarteto de Nos y la actuación de Óscar Serrano Ramírez, se presenta Zombi en el Teatro Varsovia.
Sinopsis
Roberto (Óscar) es un plomero de profesión, pero actor por convicción. Desde pequeño le llamaban zombi, por su mirada perdida y caminar tan extraño. Intentando romper la tradición familiar en el oficio y vivir el sueño de la fama, toma una oportunidad para ganarse la vida en el mundo del espectáculo, interpretando al mejor “muerto viviente” en un evento de Día de Muertos. Sin embargo, no cuenta con que esa aventura le reavivará heridas de la infancia, una en especial.
Crítica
Es a través de la puesta en escena, los movimientos etéreos y la diversificación actoral que podemos experimentar -de primera mano- la riqueza de la identidad multifacética. Roberto muestra una personalidad en fachada; construida o atravesada por el pasado de su familia, su físico y la superestructura constructivista que le obligan a ser zombi; pero no es sino hasta que algo le quebranta la máscara de seguridad que despierta su voz interior, la realidad reprimida, tal vez por miedo o por su propia protección. Es la resolución de esta eterna dualidad de contradicciones por la que vemos a Roberto encontrar una luz en lo más profundo de la oculta agua negra.
El montaje es singular; y el juego entre la iluminación, la escenografía y el actor es sin duda acertado.
El uso de la luz genera imágenes poéticas, que logran representar la incertidumbre, el dolor, la ansiedad y la pérdida.
Por otro lado, el esfuerzo físico del actor es conmovedor; se le ve un total arrojo dentro de la pieza, sobre todo multidisciplinar. Es bien sabido que ello no es nada sencillo. El cantar, bailar y actuar a un buen nivel requiere de mucho entrenamiento. Es así como un ánimo lúdico, salvaje y desmedido se logran observar en un zombi, quien por lo general no cuenta con ninguna de las características anteriores.
Cada detalle, posicionamiento, coreografía, utilería y desarrollo escénico del guion es un guiño punzante y constante, enfocado en provocar a la audiencia, a escudriñar y empalmar sus propios dilemas y transición de la psique hacía la filosofía que, tanto Óscar Serrano como Hugo Arrevillaga, han logrado implantar en la mente de los confidentes, hasta el punto de preguntarse: ¿Hay alguien ahí?
Teatro Varsovia
Varsovia 9, Col. Juárez, Alc. Cuauhtémoc
Horarios
Lunes 7, 14, 21, y 28 de noviembre
20 horas
Boletos
$250 pesos