Por: Brandon Celaya
Más de un lustro después de que el gobierno de Enrique Peña Nieto no renovara la estancia del Grupo Interdisciplinario de Expertos Independientes (GIEI) en el país, los forenses continúan revelando información que desmorona la versión oficial sobre la desaparición de los 43 estudiantes de Ayotzinapa.
Ayer, el GIEI presentó su tercer informe sobre el caso Ayotzinapa. Entre los hallazgos destaca que, el 27 de octubre de 2014, elementos de la Marina estuvieron en el basurero de Colula, posiblemente manipulando la escena en la que se sustentó la llamada ‘verdad histórica’.
Ángela María Buitrago, integrante del GIEI, reveló que la Secretaría de la Marina (SEMAR) contaba con un video sobre intervenciones en el basurero de Cocula, antes de que éste sirviera como escenario principal para montar la versión oficial, según la cual allí fueron asesinados e incinerados los normalistas desaparecidos.
Cincuenta videos inéditos fueron descubiertos por el GIEI. En uno se observa a elementos de la Marina en el basurero y, posteriormente, al exprocurador general Jesús Murillo Karam. En las imágenes se aprecia a los marinos manipulando bultos blancos.
El grupo forense también reveló que un funcionario mexicano negoció la liberación de diez normalistas para “calmar” las protestas. Sin embargo, no se llevó a cabo.
Según los expertos, el Ejército y la Marina de México supieron que los 43 estudiantes serían secuestrados, pues eran vigilados en tiempo real.
Antes de los hechos de la ‘Noche de Iguala’, al menos tres agentes de inteligencia de la Secretaría de Defensa Nacional (SEDENA) estaban infiltrados en la escuela normal rural de Ayotzinapa. Además, cuatro días antes de la desaparición forzada, la Comandancia de la 35 zona militar ordenó a todos los batallones de Guerrero que dieran seguimiento a las actividades de los estudiantes.
Durante los hechos del 26 de septiembre, el Ejército y el ahora extinto Centro de Investigación y Seguridad Nacional (CISEN) tenían ilegalmente intervenidas las comunicaciones de varios actores relevantes en los hechos, en otras palabras, sabían lo que estaba sucediendo y ocultaron información que permitiría saber la ubicación de los normalistas.
“Fue el Estado” se lee en las protestas que desde 2014 se hacen exigiendo justicia por los estudiantes de Ayotzinapa. Todo apunta a que, en efecto, el Estado desapareció a los 43 normalistas y es responsable de las ejecuciones de seis personas, incluyendo a un menor de edad.
Foto de portada: Los Muertos Crew